Claudio «Tano» Marciello – La Trastienda (11-05-2012)

Claudio “El Tano” Marciello se hizo presente en La Trastienda para presentar para reencontrarse con su público personal sumado al de Almafuerte. Marciello es uno de los violeros más completos del país, donde sus virtudes quedan totalmente expuestas en sus canciones. Acompañándolo sobre el escenario nos encontramos con un dúo Marciello (¡qué familia, eh!) compuesto por su hija Melina (en batería, donde cumple la misma función en Donna Morta) y por su primo Pablo en los teclados. El cuarteto sería completado por Leandro Radaelli en bajo, exponiendo toda su calidad, su solidez y su energía tanto como en el instrumento como así también en el desempeño sobre las tablas.

El show dio comienzo con “Motivo ciudadano”, tema que aparece en el disco “A fondo blanco” de Almafuerte, pero en esta ocasión con algunos cambios como la agregación del teclado que el original no posee. La gente ofreció su cariño en todo momento, cosa que el guitarrista lo retribuyó con agradecimientos y con lo que mejor sabe hacer, tocar la guitarra.
Para seguir con el show y sin mediar palabra, “Adelante” (de su segundo disco “De pie”) se encargaba de apoderarse aún más de la gente que seguía alentando y coreando los temas, dando lugar a posteriori de varios cantos en favor del “Italiano” quién no tardó en soltar las siguientes palabras: “Estoy muy contento, no pensé que iba a venir tanta gente. Yo no soy muy charleta, soy más de sentir”. Y vaya si lo siente, a tal punto que se lo vio emocionado en varios momentos de la noche.

Un poco de pogo venía bien, y de eso se encargó el tremendo “Libre de temor” (sin la presencia de Iorio como en 2004, claro está) que ocasionaba unos empujones para llegar al escenario y cantar junto al “Tano” a viva voz, mientras no dejaba un momento de ajusticiar la guitarra y ofrecer su tan alta habilitad para la ejecución de dicho instrumento. Al término de cada tema, el “Tano” miraba a su hija Melina y levantaba el pulgar en señal de que todo estaba saliendo bien, y no se equivocaba ya que ella tiene sus dotes para la batería. En cuanto a sus otros compañeros, siempre se acercaba a Leo y a Pablo para cantar junto a ellos, mientras que en el caso de Leandro no paraba de saltar ni de moverse con su bajo. Y en el caso de Pablo, tiraba esas magias “a lo Deep Purple” mientras no dejaba de cantar los temas. Luego de “Te vi pelear” y “Aunque nos pese el infierno”, uno de los temas más pedidos seguía en la lista. “Banderas rojas”, tema dedicado al Gauchito Gil del que el “Tano” lleva una imagen tatuada en su brazo.

“Voy a decir gracias toda la noche” había balbuceado entre aplausos, que no se hacían esperar al final de cada tema y más aún cuando luego de “Encuentro” sonó “El show de Nahuel”, penando la explotación minera que se está quedando con varias vidas al son de “un progreso mejor”. Si bien lo de poco charleta es cierto en parte, todos sabemos que el habla con su guitarra en mano y más cuando larga esos instrumentales como “Pucará” que van directo al pecho. Quién les escribe es admirador de los aviones, y el Pucará junto con el A4 son dos de los que encabezan la lista. En fin. Así como Ricardo Iorio escribió su letra de “Homenaje” para Augusto Romero, el “Tano” hizo lo propio con “De noble corazón” dedicado a Carlitos Chávez, un paisano cordobés. Ahora volvían los temas instrumentales, esta vez con “Las junturas”, “Sopla el pampero” y “Alma de budín”, tema perteneciente al grupo Divididos.

Con unos problemas en el micrófono, que fue cambiado, la banda siguió con “Buena suerte”, “Me fui de viaje” y el impresionante “Querido padre”. Sin dudas, uno de mis instrumentales favoritos a nivel nacional e internacional. A esta altura de la noche todo era emoción que fue multiplicada cuando el “Tano” presentó a su hermano, quien fuera su mentor en eso de tocar la guitarra. Un saludo entre hermanos sollozos y todos los presentes aplaudiendo ese encuentro tan agradable. Ya la noche estaba llegando a su fin, pero antes faltaban temas como “Adiós Yoli” (con algunos cambios), “Un caso en un trillón” que hace referencia a Franquito, un pequeño de doce años asesinado de un balazo en un ciber Moreno y el ya conocido “Va Benne”. Cuatro temas finales: “Con valor al despertar”, “La Matanza” (presentando a la banda, todos oriundos de dicho partido y que son el futuro de nuestra escena pesada nacional) “Vengo” y por último “Tenga mano tallador” también con algunos arreglos y un mini solo de bajo como también de teclado. Así concluía el show de uno de los violeros más queridos, que demuestra toda su habilidad y que canta lo que realmente siente. Ah, ¿y carisma? De carisma tiene un libro entero.

Cobertura: Nicolas Lopez




· Volver




















logos_apoyo