Linkin Park pisó por segunda vez suelo nacional a casi dos años exactos de su primera visita a nuestro país. En aquella ocasión el Estadio Vélez Sarsfield fue el punto de reunión, teniendo como protagonista a un sonido demasiado bajo que marcó el descontento de la mayoría de los asistentes, sobre todo aquellos que estaban ubicados en las plateas laterales y en la popular general. Bajo el marco del “Living Things Tour” los LP volvieron para presentar su último disco en el Estadio GEBA, disco que mezcla sus primeras etapas de sonido pesado metalero con toques de rap, con una etapa más moderna ligada a un sonido más electrónico. Para fortuna de todos, los californianos fueron acompañados de un sonido muy bueno y claro, pudiéndose apreciar con gran claridad todos los instrumentos que posee la banda y que no son pocos. A saber: guitarras, percusiones, guitarras rítmicas, DJ, sampler, bajo, teclado, piano, batería, MC…

La noche se presentaba con vientos leves, factor que puede ser letal para un concierto en un lugar abierto. Sin embargo esto no jugó en contra y favoreció a poder disfrutar las dos horas de show que Linkin Park tenía preparado para todos sus seguidores. Todo comenzó sumamente puntual a las 21:35 con “A place for my head” de su primer disco Hybrid Theory (2000). El campo estaba abarrotado de gente hasta un cuarto de su totalidad, mientras que más atrás y de forma más dispersa la gente completó la mitad del campo de GEBA. La platea también concentró una gran cantidad de público, quienes acoplados a los del campo generaron un muy buen marco para acompañar a la banda cantando durante toda la noche. A continuación sonó “Given up” de Minutes to midnight (2007) y luego “New divide” que no fue completada debido a que en las vallas la gente estaba demasiado apretada, por lo que Chester paró todo al ver esa situación y en castellano preguntó: ¿necesitan ayuda? Luego de varios minutos y de un intenso trabajo por parte de la gente de prevención, la banda volvió a su primer disco para tocar “With you” y “Somewhere I belong” de su trabajo titulado Meteora (2002).

Otro elemento para destacar fue la puesta en escena, que contaba con una enorme pantalla que cubría todo el ancho del escenario, proyectando diversas imágenes a lo largo de todo el show. Además poseían tres plataformas y dos rampas cruzadas formando una X, mientras que en el centro se encontraba el teclado con una bandera Argentina firmada por varios miembros del fan club (incluido el staff) de nuestro país. Luego fue el turno de pasar a su último disco y el primer tema en sonar fue “In my remains”, seguido por “Victimized” que fue enganchado con “Points of authority”, tal vez uno de los temas más populares de la banda.  Volviendo a su actual trabajo sonó “Lies greed misery” pasando por “Waiting for the end” y “Breaking the habit” de los discos A thousand suns y Meteora respectivamente.

Luego de tocar “The catalyst” presentaron “Lost in the echo”, tema de su último larga duración que posee un video muy particular. La banda creó un sitio especial donde sus fanáticos podían loguearse con su cuenta de Facebook y así logar que en las imágenes del video aparecieran sus fotos. Ya pasando la mitad del concierto apareció otro clásico como “Numb” acompañado de “What I’ve done”, conocido por la gente que no pertenece al ambiente debido a la aparición en la película Transformers. El sexto y último tema de Living things fue “Burn it down” que precedió al clásico de los clásicos como es “In the end”, dando lugar a “Bleed it out” que fue mezclada con “Sabotage”, tema originario de los neoyorquinos Beastie Boys.

La banda desapareció un momento y volvió para los bises, que fue iniciado con “Tinfoil”, seguido por “Faint” y un medley entre “Lying from you” y “Papercut”. Para finalizar su muy buen show, LP se despidió de todos con el genial “One step closer” del disco Hybrid Theory, cerrando así una noche que reivindicó totalmente a la fallida del 2010. Fue un show completo ya que hubo temas de todos sus discos, un buen sonido, una buena escenografía y un público fiel que acompañó toda la noche, y que sin lugar a dudas se fue deseoso de que Linkin Park regrese prontamente a nuestro país.

Galería de Fotos:

Cobertura: Nicolas Lopez
Fotografías: Victor Guagnini