Arribé al estadio ubicado en Gutenberg 350 alrededor de las 20 hs, no había mucho movimiento por la zona pero de a poco la gente fue copando el lugar porque se presentaban dos pesos pesados por estas pampas: Ratos de Porão y Gatillazo.

Crossover, Thrash, Hardcore, punk… Defínanlo como quieran, Ratos de Porão piso una vez más (y van…) el suelo argentino para dejarnos sin aliento. «Contando os Mortos», del mejor disco de los brasileños (Anarkophobia, que cuenta con dos ediciones, una cantada íntegramente en Inglés y otra en Portugués) fue el elegido para que nos estallemos las cabezas unos a otros con un sonido impecable.

RDP tuvo muchas mutaciones musicales desde su comienzo pero si de algo estamos seguros es que no desilusionan nunca en sus presentaciones en directo, la gente estaba enloquecida literalmente. Cada golpe al tacho de la batería, cada riff, cada grito de Gordo y cada base de ese increíble bajo (Juninho, para mí se lleva el premio al carismático de la noche, se movió por todo el escenario, saltó, bailó y como si fuera poco hizo temblar las paredes con sus cuatro cuerdas). No faltaron clásicos como «Sofrer» y ni hablar del tan aclamado «Crucificados pelo Sistema».

Más allá de que la mayoría del público presente fue a ver al gran Evaristo, había bastante publico thrash/heavy,cosa que me parece espectacular. Los tiempos cambiaron y eso demuestra que la gente cada vez es más tolerante (tampoco vamos a poner a Bersuit con Motörhead).

Eeeevaristo!! y el golpeteo de las palmas, como en aquella época en donde La Polla Records eran la banda más significativa del punk en español, era el llamado para que Gatillazo salga a la luz y brinde un gran show frente a un gran puñado de gente que RDP había dejado como gallos de riñas en una pelea ilegal. La excusa de esta nueva visita fue la presentación de su cuarto larga duración titulado «Sangre y mierda» de los cuales hicieron canciones tales como: «Treinta y tres», «No love»,»¡Esto es vida!» y «Guerra social». De sus tres discos anteriores sonaron «Aprieta el gatillo», «N°1 en USA», «Pánfilo Panfleto ataca de nuevo», «Pijos Powers», «Repito lo que veo» entre otros. Y por supuesto no podían faltar los clásicos de La Polla que todos esperábamos, «Ya no quiero ser yo», «Lucky men», «Salve», «No somos nada», «Jhonny» y «Txus» se llevaron los aplausos de toda la gente que se hizo presente para vivir una verdadera fiesta donde reinó la crítica a la sociedad, la política, la religión y de todo lo que nos habla el gran Evaristo desde 1983 cuando editaban su primer disco.

Cobertura: Daro Sosa