3 de Febrero era ya y creo que casi todos los que íbamos a estar presentes en el recital sabíamos que seríamos testigos de una noche histórica en el Alto Valle de Río Negro y Neuquén, mas precisamente en Cipolletti. Después de casi 15 años llegó lo que muchos veíamos bastante lejano. Ver a Malón con la formación original.

Eran las 20:45 y ya estaba presente en el complejo Meet para poder ingresar al recinto. A las 21 Hs abrieron las puertas a la gente y cerca de las 21:30 subió al escenario la banda local «Infame» (única banda soporte) para hacer entrar en calor a los presentes de lo que se iba a venir hora y media después.

«Infame» banda con una importante trayectoria, mas de 10 años, hizo pasar un buen rato a los presentes presentando canciones propias y regalándole a la gente 3 cover de V8 (Cautivos del Sistema, Brigadas Metálica y Destrucción). Con un muy buen despliegue y sonido la gente le reconoció su muy buena actuación por medio de aplausos y ovaciones. Poco mas de media hora duro su show que sirvió para dar paso al plato principal de la noche.

Asistentes por acá, asistentes por allá era lo que se veía sobre el escenario y la gente esperando ver alguna señal que le indiqué que estaba todo en pie del cañón. Es por eso que a las 23:03 se apagaron las luces y empezó una introducción con ruidos, truenos y mucho juego de iluminación. «Sintoma de la infección» fue la canción elegida para el inicio de la noche soñada por todo metalero.

Excelente iluminación, sonido y despliegue de la banda hicieron que se pueda disfrutar a pleno el show a lo largo de la noche. Pegado a «Síntomas…» tocaron «Culto Siniestro» para no dar respiro a la gente y dejar en claro que eso era Malón. Luego de un breve cruce de palabras con el publico Strunz dio la señal para que comience «Nido de almas». Con un claudio prendido fuego en las voces, el tano Romano con su ESP haciendo sonar sus clásicos Riffs, el pato que a pesar de estar al fondo del escenario lleva bien adelante su batería con un sonido envidiable y karlos Cuadrado siendo esa pared donde el tano se pueda apoyar sin caerse. Para no perder el ritmo continuaron con «Grito de Pilagá» con ese doble bombo del Pato que te lo hace sentir en el pecho. Al cabo del tema dieron un poco de aire a los presentes, pero éstos no se quedaron quietos y empezaron a entonar el «Baila la hinchada…» donde la banda acompaño como hizo siempre. Un momento importante, mas que nada para los neuquinos presentes fue cuando se escucharon las primeras notas de Cuadrado entonando «Cancha de Lodo». Canción original escrita por el poeta neuquino Don Marcelo Berbel (N: el titulo original es «Destino Ladrillero», la banda la reformó). Otro momento esperado por los presentes era escuchar algún cover de Hermética, en cierta forma estábamos viendo al 75% de la H, así fue que sonó «Vientos de Poder» y explotó todo. Siguieron con su setlist recorriendo su corta discografía (2 discos). En «Cicatrizado» tuvo un par de problemas O’connor pero paso desapercibido.

Pararon unos minutos para realizar algunos ajustes y para no perder tiempo el gran Tanito fue al frente con su viola y entonó 30000 Plegarias junto con la gente para aprovechar el tiempo. Volviendo al ruedo, pasaron «hipotecado», «Evitando el Ablande» con un pogo demoledor «uno de los mas violento que he vivido» me comentó un amigo y siguieron con «Castigador por Herencia» EL tema de Malón en mi opinión. Así iba transcurriendo la noche, con una patada en la cabeza constantemente. Luego tocaron «30000 Plegarias» cantado, el ultimo tema compuesto por la formación original hasta el momento.

Unas breves palabras de O’connor antes del siguiente tema «El próximo tema se lo queremos dedicar a Fuentealba y otros que han muerto por el gatillo fácil». Y para el final empezó el «ritual» con la introducción de Masa Anestesiada de Hermética para luego dar lugar a uno de los tantos himnos de la H… «Tu eres su seguridad». No es algo del otro mundo pero las canciones de Hermética se cantan solas, O’connor casi que ni se tuvo que calentar en cantarlas.

El reloj marco las 00:45Hs y llegó el final pero ésta vez con el principio. ¿Qué decir de la banda? Mucha conexión con el público, los problemas que se presentaron pasaron desapercibidos, los músicos entregaron todo… la gente se fue contenta, esa imagen vale mas que millones de palabras.
Párrafo aparte para el Tano Romano, no se cansó de sonreir, intercambiar cosas con el público, regalar púas personalmente. Una humildad increible, un guitarrista que no será el mas virtuoso o mas rápido, pero que sus riffs y solos transmiten alegría y fuerza.

Galería de Fotos:

Cobertura y Fotografías: Nahuel Olano