El año aún no se termina y continúa dando gratas sorpresas. Un guitar hero pisó Buenos Aires el pasado viernes primero de noviembre. El guitarrista holandés Adrian Vandenberg (Vandenberg, ex-Whitesnake) unió fuerzas junto al enorme Mats Levén (ex-Yngwie Malmsteen, At Vance, Treat, Therion, Swedish Erotica, Dogface, Candlemass y otros) para hacer un repaso de su carrera no solo con la serpiente blanca sino tambien con su banda Vandenberg, aquella que lo puso en el radar siendo solicitado por el rey David. Claro que no vendrían solos, completando la formación estuvieron los brasileños Bento Mello (Sioux 66 y Nite Stinger) en bajo, Gabriel Haddad (Sioux 66) en batería y Flavio Sallin (The Heathen Scythe, Cova Rasa) en teclados. La noche se completó con los locales Tándem, Gunner y Karkaman.
El tráfico en Buenos Aires puede ser una trampa mortal para aquellos que quieran llegar a horario a un lugar. Accidentes y retrasos en el servicio público de transporte hicieron que para cuando me apersoné en El Teatrito, los muchachos de Gunner estuvieran cerrando su show, perdiéndome completamente el show de Tándem. Ya perdí la cuenta de cuantas veces lo vi, pero siempre son garantía. Hard/glam rock influido totalmente por los 80s, tanto en sonido como en imagen, sumado a un gran desempeño de cada uno de los músicos, hacen que los shows del quinteto sean un viaje a otra época. Karkaman salió al escenario y los problemas no se hicieron esperar, un acople constante en uno de sus guitarristas desdibujó los enérgicos shows a los que nos tienen acostumbrados. Con mas corazón que odio, los muchachos fueron intercalando composiciones propias con covers tales como «Nos Siguen Pegando Abajo» y una inesperada versión de «Campanas en la Noche» de Los Tipitos. El cierre a puro medley puso final a un show que no estaba en los planes de nadie. Por suerte el rock siempre da ravancha.
Sin mucho preámbulo, Vandenberg y los suyos salieron a escena sin guardarse nada, «Bad Boys» fue el primer golpe para luego arremeter sin respiro alguno con «Fool For Your Loving». El partido ya estaba ganado. Mats Leven, con una gran remera de Alice Cooper, arengaba al público mientras Adrían Vandenberg se mostraba muy agradecido por el afecto y la calidez del público argentino. De aquí mas lo vivido fue un repaso por la carrera del holandés, volviendo a su carrera solista en canciones como «Your Love Is In Vane» y en la reciente «Hit The Ground Runnin». Todas eran bien recibidas pero sin lugar a dudas el recinto explotaba ante los primeros acordes de aquellas canciones de la serpiente blanca. «Is This Love» nos ponía melosos, mientras que «Crying In The Rain» mandaba a la banda a boxes. La gran «Burning Heart» nos traía de nuevo al escenario para los últimos dos golpes, primero «Still of the Night» para cerrar definitivamente con otro hit mundial como lo es «Here I Go Again».
El sonido pudo haber sido mejor, ciertos problemas de acoples por momentos y algunos desencuentros en la mezcla de los instrumentos se hacían presente mas de lo deseado, pero aún así eso no opacó el gran show de Vandenberg y compañía. El público extasiado abandona El Teatrito con una sonrisa de oreja a oreja, por algunas horas viajamos a una época donde la palabra «rock» no la usaba cualquiera, donde las guitarras hablaban y las cuerdas vocales eran llevadas al límite.
Por Martin Tula
PH: Martin DarkSoul (Gentileza Icarus Music)
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