Los homenajes se hacen en vida y Nepal esta más vivo que nunca. Sin lugar a dudas, el 30 aniversario de Raza de Traidores, un disco fundamental en la banda y el metal criollo, merecía un festejo grandilocuente. Sin lugar para los débiles, el cuarteto asalto el Teatro Flores.
¿Por qué es importante está celebración? Simplemente, porqué no lo sería. Raza de Traidores salió al mercado en en la seguidilla del primer Horcas y el apogeo de Hermética. Allí, radican los puntos más altos del heavy metal argentino. Además, Nepal se convertiría en una de las bandas grandes sin ser heredar nada de V8. En ese tiempo, Nepal andaba por las mismas líneas que las bandas mencionadas. Sin embargo, el cuasi gutural de Larry Zavala corría el limite de la oscuridad y pesadez. A su vez, las melodías épicas de Javier Badala y el bajo a trote y moche con destellos progresivos de Beto Vázquez marcaron una diferencia ante el resto.
Como todo show importante – como si alguno no lo fuera – al escenario arribaron invitados como Joana Gieco en teclados, la presentación de Alejandro «Tato» Devetak, historico manager del grupo, a la producción NWM, a Lola Nagel, a lo seguidores y al metal. También vídeo un vídeo homenaje a Locomotora Esposito. Y como si fuera poco la introducción estuvo a cargo del Norberto «Ruso» Verea, uno de los referentes de cualquier comunicador vinculado a la cultura pesada.
Previo a todo esto, Meyers se sumo al festejo por convicción y respeto a una de las bandas más importantes del metal argentino. Además, aprovecharía a tributar a Osvaldo Civile con «Solución Suicida» de Horcas y a Pato Larralde con «Hecho a mi medida» de Los Antiguos más algunos temas propios. Nepal, por su parte repasaría el disco en cuestión íntegramente más temas de Manifiesto y alguna que otra perla.
A 30 años del debut, Nepal volvió a unir fuerzas con tres de sus integrantes original y la inclusión de Adrián Esposito (batería). A 30 años del debut, las denuncias sociales, el manifiesto de Nepal, sigue intacto, por bien y por mal. El mundo parece no haber cambiado mucho y por ende, la posición de Zavala y compañía tampoco. La necesidad del aniversario es por la gente, por la banda y el tiempo y espacio es el adecuado. La casta como eje en la coyuntura sociopolítica y el negacionismo frente a la terrorismo de estado nuevamente en agenda. De esta manera, por nostalgia, por sentimiento pesado y por sobretodo por compromiso social y artístico Nepal volvió a cantar «Falsos Profetas», «Represor», «Besando la Tierra», «Te destruire». Después de todo, ante la memoria, ante la injusticia, ante la represión, para combatir la señal será del metal.
Cronista: Jonatan Dalinger
PH: Leticia Villalba
· Volver
