Furia Metal Fest día 2: Krisiun, V.I.D.A., Serpentor y más – Zárate (11-03-2023)

El pasado fin de semana del 10, 11 y 12 de marzo, se llevo a cabo la segunda edición del Furia Metal Fest (FMF), en la ciudad de Zarate, Buenos Aires. El festival es una iniciativa de la gente de V.I.D.A. (Victimas Inocentes de Argentina), oriundos también de la misma ciudad. Mientras que el año pasado, el FMF fue un sólo día, contando con bandas como Plan 4, Lethal, Avernal, No Guerra y V.I.D.A. entre otras, en esta segunda edición, los días fueron tres. En la presente cobertura, se hará mención al segundo día, el sábado 11 de marzo de 2023.

La jornada arrancó con temperaturas muy altas, pero con gran expectativa por lo que acontecía. En mi caso, decidí alojarme en un hotel cerca del predio, y lo que se podía notar era que la gran mayoría de huéspedes se encontraban allí por mi misma razón, el FMF. A eso de las 16:15 ingrese al Campo Social y Deportivo Municipal de Zárate, predio donde transcurrió el festival. El ingreso, consistía en anunciarse en una pequeña carpa en la entrada, y en caso de estar en auto/moto, ingresar al estacionamiento. Todo muy bien señalizado y organizado, a tal punto que la mayoría de medios tenia su credencial, y para quienes habían adquirido su entrada, había pulseras con un lindo diseño y de buena calidad.

Llegando a la zona propiamente dicha del festival, se podía ver a la izquierda la zona de acampe, donde había un buen número de carpas armadas, y hacia la derecha, el primer escenario, el principal, denominado «Furia». Al momento de mi ingreso, no estaba tocando nadie en dicho escenario; lamentablemente me perdí las presentaciones de Filosa y de Perro Lobo. Frente al escenario «Furia», bien al fondo, se encontraba la zona del merchandising oficial del festival y a su izquierda la zona gastronómica: una barra que ofrecía bebidas y comida. Cabe mencionar que los precios estaban muy accesibles, que dejaban ingresar con botellas de agua (como asi también recargarlas) y que la comida iba desde empanadas fritas, choripan y bondiola, hasta pebetes de jamón y queso y opciones veganas como burritos, brochettes y paletas. Todo de gran calidad, fresco y de nuevo, precios accesibles. La gente que trabajo en dicha zona, siempre con buena predisposición y con gran rapidez, cosa que hacía que la fila avanzara a buen ritmo.

La primera banda que pude ver, en el otro escenario, el «Caos», fue Smegma, desde Catamarca, que daba inicio a la acción en dicho escenario. La banda ofreció un set de puro slamming brutal death metal frente a un buen número de personas teniendo en cuenta el horario, el calor y la poca sombra que había en ese momento. Algunos de los temas que sonaron fueron «Amputación Violenta» y «Dolor de Tumba». Desde mi ubicación, bajo unos árboles y no tan cerca del escenario, pude escuchar y sentir que a mis espaldas había acción. Es que era el turno de Templo de Humo (TdH). El sonido, que en ese momento me preocupo un poco, se desenvolvió de manera impecable ya que con acercarse el escenario bastaba para no enterarse lo que ocurría en el otro sector. Lógicamente en la transición de un escenario a otro, en determinado momento, las bandas se mezclaban. Los rosarinos de TdH se movieron entre el rock pesado, el groove metal y momentos mas extremos, siendo «Virgen de la Muerte» una condensación de esos elementos. Mención para la gran actuación de su vocalista Emanuel Contreras, que no paro de arengar y saltar sobre el escenario. De vuelta en el segundo escenario, y con una puntualidad por demás estricta, Rebhellion, desde San Nicolás, decía presente. La banda con mas de 10 años de trayectoria ofreció un death metal con tintes melódicos y entre los temas de su lista, «Uk Now Argentina» fue de las mas potentes.

Una de las atracciones, además de lo musical, era la zona de stands. Ubicadas a la derecha del escenario «Furia» y a la izquierda y al fondo del escenario «Caos», una fila de carpas, una al lado de la otra, ofrecían distintos productos. La mayoría indumentaria relacionada al rock y al metal, como por ejemplo r3v Store, Notredamn, Chivo serigrafía. Parafernalia relativa a la indumentaria como cadenas, gorras, parches y demás de la mano de Rock in the Wind Haz materiales. Arte gráfico por parte de Annie, por supuesto que stands de discos como el de 2M Producciones y hasta el gran stand del luthier Martín Gómez que exhibía guitarras y bajos. En esta misma zona, mas cercana al escenario principal, la carpa de la radio local RD1, y cercana a esta, la carpa para prensa, donde se podía cargar celulares y buscar credenciales.

De nuevo a los escenarios, era el turno de Violent Execution, una de las bandas que mas ansiaba ver en este festival. Sin dudas fue de las presentaciones mas potentes, y movidas. Crossover directo y sin vueltas, con humor,  crítica y mucho insulto a las altas temperaturas. La banda viene de sacar Invasores el año pasado, por lo que la mayoría de temas tocados, pertenecen a dicho disco, algunos de ellos fueron «Antología de Pandemia» y «Carpinchos vs Tinchos». Además, temas como «Kung Fury» o «Traidor» llevaron a los más valientes y audaces a poguear y moverse al ritmo de los riffs veloces y vertiginosos. Si algo ofrece este tipo de festivales, es la diversidad de géneros. Tal es asi, que habiendo visto a cuatro bandas, ninguna repitió género. De hecho la quinta que me predisponía a ver, tampoco repetiría, ya que se trató de Innerforce y su power metal. Siempre ofrecen buenos shows, ya que además de su música, y sus estribillos pegadizos, la banda siempre se muestra con gran humor, y buena onda para con el público. Cabe destacar además, que Martín Puricelli Camps tocó con una bota en su pierna luego de una operación, bajo el rayo del sol, y con la mejor de las actitudes. Sin dudas, el clásico y homónimo de la banda «Innerforce» fue el tema más festejado y coreado por los presentes. Pasadas las 18hs, Salia a escena Piel de Lobo, en lo que sería una de las propuestas más originales de la jornada. La banda esta formada por cordobeses y venezolanos, y su música es una amalgama de metal y música latina, con mucha carga social y relacionada al medio ambiente y la naturaleza. Quizás el momento mas «festival» de la jornada, fue con «La Tierra es de Todos» en donde apareció una pelota gigante rebotando entre el público y la banda.

Desde Neuquén, Aversus era otra de las bandas que mas me seducía ver, sobretodo porque las anteriores veces que tocaron en Buenos Aires, no había podido asistir. No conocía a sus integrantes ni a su performance en vivo, sólo su música. Con dos discos en su haber y material nuevo en camino, la banda fue uno de los puntos altos en cuanto a energía y carisma de sus músicos; mención para Bruno Martínez (voz) y Diego Navarro (bajo) que ya sea con palabras, bailes o saltos descontrolados, contagiaron al público esa vibra. Desde «Parálisis de Sueño» de su primer disco Mil Escenarios Quemándose (2014) hasta un tema nuevo titulado «Tormenta de Cenizas», la banda desplegó un metal podrido y moderno de alto calibre, y el público fue reflejo de eso, armando rondas y pogos constantemente. Siguiendo con la grilla, los históricos Necratal levantaban la bandera del thrash argentino, repasando trayectoria, con temas como «Violencia» del disco homónimo del año 2015, «Totalmente en Contra» también del mencionado disco y hasta tocando temas nuevos. El sol iba bajando, ergo, la sombra iba aumentando y aunque la temperatura seguía por demás alta, el ambiente se iba tornando un poco mas ameno.

Frente a un gran número de personas, Malicious Culebra aparecía en el escenario «Caos» para dar un show que va mas allá de lo meramente musical. Como tiene acostumbrado la banda, hubo actuaciones y teatralizaciones en el escenario, acompañando a la banda en su labor. La presentación en el FMF significó el debut del baterista Fabián San Martín, quien se desempeño de gran manera. Algunos de los temas presentes fueron «Lo que Soy» y «Ni Olvido ni Perdón» entre otros. Luego de altas dosis de metal rápido, violento y extremo, fue la hora de bajar unos cambios para la presentación de Grito Clandestino, oriundos de la provincia de Corrientes. En su primera visita a la provincia de Buenos Aires, la banda supo ofrecer su rock pesado/metal mas tradicional, con temas como «Sin Control» y «Furia y Satán», ambos pertenecientes a su único disco Sigo Peleando de Pie del año 2017. La única banda exponente de black metal presente en el festival fue Wolves’ Winter, y vaya exponente. Para los que conocemos la banda, sabemos de su despliegue en vivo. Eso no hizo que no deje de sorprender el aguante frente al calor. No debe haber sido fácil tocar con esas vestimentas y máscaras, y aun así el show fue impecable. Desde el sonido, hasta el armado del escenario, con las características velas y candelabros que suelen aparecer en sus conciertos. A esta altura del sábado, a eso de las 20:30, la noche decía presente.

Uno de los tantísimos platos fuertes se aproximaba, era la hora de Nvlo en el escenario «Furia». La banda que hace rato (por mas joven que sean) viene pisando fuerte, se encuentra trabajando en su cuarto disco de estudio, y próxima a participar en la Metal Battle, por un lugar en el Wacken Open Air. Con el nombre de la banda bien grande en el escenario, como es característico, Nvlo arremetió con «De Cara al Vacío» e inició un verdadero pandemonium, acompañado de una olla humana que nunca se cerró y estuvo en estado de hervor constantemente. Adelantaron uno de sus nuevos temas, y uno de los puntos altos fue «Péndulo», perteneciente a su tercer trabajo Fosa (2021). Si de escena emergente se trata, una de las bandas que lleva la bandera de dicha escena es Against, que apenas finalizando el set de sus colegas, daban inicio al propio. Con grandes compromisos este año, como por ejemplo la fecha con Paul Di’anno o con Kreator y Testament, la banda demostró una vez mas por qué estan en el lugar que están, por propuesta, música y convocatoria. Uno de los momentos mas álgidos en su presentación fue con el discurso de San Martín en la voz de Ivan Monastirsky, en el tema «El Libertador», que además de la infaltable ronda, 4 bengalas, 2 blancas y 2 celeste, inundaron el lugar de humo color argentino.

Luego de una visita al sector gastronómico, y de un descanso de ir y venir entre los escenarios, fue momento de Ritual de Nacimiento, banda proveniente de Uruguay. Una efectiva dosis de death metal con tintes melódicos y algunos pasajes mas blackmetaleros como por ejemplo en «Putrefactor», agitaron a las huestes que aumentaban la energía acorde iba terminando la jornada. Si hay un género poco explotado es el metal industrial, pero por suerte esta Bloodparade para agarrar la posta. Siendo sincero nunca los había escuchado, pero me interesaba mucho verlos. La sorpresa fue total, y tanto la propuesta, como la respuesta de la gente me dejaron una muy buena sensación. Por momentos uno estaba en un recital de metal, pero al instante estaba en una fiesta electrónica, y esa mezcla resultaba muy orgánica y entretenida para los presentes. Desde aquellos seguidores/as de la banda, hasta aquellos que ya evidenciaban alguna dosis interesante de alcohol, el disfrute se palpaba en el aire. Volviendo al heavy metal mas tradicional, Helker subía al escenario, siendo una de las bandas con mayor trayectoria del festival. «Viento y Fuego» perteneciente a A.D.N. (2010) fue uno de los puntos fuertes de su presentación.

El escenario «Caos» se preparaba para la última banda del día. El público se agrupaba y así, Serpentor daba inicio a su show. La banda esta viviendo un gran momento, tanto por compartir escenario con bandas como Destruction, como también así por sus propios shows como la doble función en el Teatro Flores. Esto es algo que se ve en cada uno de sus shows, con la gente totalmente prendida fuego, coreando y pogueando con cada tema. Temas como «Carnicero» o «Sacerdote del Horror» del último disco, muestra la gran aceptación que tuvo en sus seguidores dicho trabajo. Otros mas clásicos, como «Mirar sin Ver» o el recurrente cover de «Rainning Blood» de Slayer levantaron polvo del pogo armado. Y para cerrar su gran y enérgica presentación, otro clásico como «Privación Ilegítima de la Libertad».

Momento para los anfitriones, V.I.D.A. era la ante última descarga de adrenalina y energía del día sábado. Jor Cybula, Javier Cybula y Javier Cuello dieron un show que seguramente para ellos quede en la historia de la banda. Uno de los primeros comentarios por parte de Jor, fue referido a la unión del metal, que se ve y se vio en eventos como el Furia Metal Fest. Ya con todo el público concentrado en el escenario principal, se podía apreciar la gran cantidad de presentes, y de la misma manera las rondas y las corridas violentas aumentaban de tamaño. «Mentes Enfermas» o «En la Oscuridad» despertaban agite y entre tema y tema, su vocalista no dejaba de agradecer, de reflexionar y de hacer ver lo que se había logrado. Era evidente el orgullo en cada uno de los integrantes del trío al ver semejante movida llevada a cabo. La lista continuo con temas como «Acción/Reacción» y «Almas», para luego dar paso al cierre de la mano de «Espectadores de la Masacre» y dejar así, un escenario y un público prendidos fuego.

Un cierre a la altura de las circunstancias y con una banda con relevancia a nivel mundial se aproximaba. En las primeras horas del domingo 12, los hermanos brasileros de Krisiun daban cierre al segundo día del festival. Con mas de 30 años de trayectoria y una extensa discografía en su haber, los liderados por Alex Camargo, dieron una muestra excepcional de death metal, en su vertiente mas veloz y brutal. Desde el inicio con «Kings of Killing» y «Swords into Flesh» quedó claro por qué Krisiun es reconocida mundialmente por su death metal marca registrada, y también como sus temas de principios de los 90s conviven tan bien con temas de los 2020s. Algo que no paro de remarcar su vocalista, fue la hermandad latinoamericana, y de cómo ellos se sienten en casa cuando vienen a la Argentina. «Descending Abomination» y «Vengeance’s Revelation» siguieron con la masacre sonora de los brasileros, y hasta hubo momento para un cover mas rockero como lo fue la versión de «Ace of Spades»  de Motorhead, lo que armo uno de los pogos mas grandes del día. Luego de hacer mención a un abuelo argentino, y de volver a remarcar la unión en el metal y en latinoamérica, Krisiun cerro su contundente descarga de distorsión con la icónica y clásica «Black Force Domain» del homónimo y debut disco del año 1995.

El segundo día del Furia Metal Fest llegaba a su fin. Un festival que seguramente sea un punto de inflexión en la escena del metal argentino. Una sensación de alegría, satisfacción, cansancio, pero por sobretodo, ganas de mas, se podía apreciar en músicos y espectadores. La movida llevada a cabo por la gente de V.I.D.A. es para aplaudir de pie, un profesionalismo y una dedicación que dio sus frutos y que esperemos, los siga dando a futuro en nueva ediciones del festival.

Cronista: Juan Cordiviola




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